viernes, 31 de julio de 2009

No tiene nombre por ahora...


Pues entre en el concurso de aiko :D aqui esta la historia:
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Octubre, mes de las brujas, así le llamaban y por supuesto que yo no creía en eso, pero ellos tenían grandes leyendas de brujas que revivían en Halloween, lo usaban como truco comercial para atraer gente al pueblo pero mi historia no es un critica a las formas de obtener turismo, así que vamos a lo nuestro, mi historia trata de como un día para otro pase de no creer a si hacerlo. Comenzó la mañana del 30 hacia frío, una brisa helo mi cuerpo, ni los abrigos ni la bufanda me protegían del viento. Logre llegar al colegio un poco tarde pero llegue. Camine hasta llegar al aula donde recibíamos la clase de español, al llegar me senté y me quede embobada al ver que él estaba sentado al frente mío. La hora paso y la clase acabo todos salieron deprisa alegres porque el receso al fin había llegado, pero yo salí de ultima. Sabia que ese no seria un buen día y sin ánimos salí al jardín con mis amigas. Luego de un rato quise caminar sola y fui por detrás del colegio donde un grupo de enormes y acogedores árboles me esperaban. Mas allá sobre una colina como a unos 700 metros una casa vieja y abandonaba aterraba la vista de todos los estudiantes. Camine sin ver a la gente, solo veía la casa que me llamaba la atención era muy vieja, con aspecto aterrador y una leyenda del pueblo contaba que ahí habían vivido 2 poderosas y malvadas brujas y que cada 31 salía humo de la chimenea. Tras perder el interés en mirar esa casa regrese la mirada al colegio, lo vi y mi fuerza se destruyo en mil pedazos, mis ojos se llenaron de lagrimas, yo se que no lo quería como antes, que todo había cambiado no éramos los mismos pero me dolió igual. Tuvimos algo y aun existía un sentimiento o por lo menos eso pensaba yo. Ese tonto estaba frente a mí junto con otra, abrazándola y dándole besos. Lo siguió viendo hasta que se percato que yo estaba ahí. Me miro con lastima y yo no pude mas volví la cara y cuando quise salir corriendo una mano sostuvo la mía era él, había visto lo que paso y como ese tonto era uno de sus amigos él sabia que ya desde hace mucho me había estado engañando. Y no se si fue por la culpa de no haberme dicho o por simple lastima me quiso consolar. Rápidamente quite mi mano y corrí hacia la colina.

-Espera-grito él, se quedo quieto unos segundos como pensando si me seguía o no. Y decidió hacerlo, salio corriendo tras de mi No me interesaba si la leyenda era cierta lo único que quería era huir de ahí, de ese sentimiento, refugiarme donde nadie me viera y llorar. Cuando llegue donde estaba la casa no lo dude, corrí a la puerta y cuando estaba en la terraza...

-No-grito él- espera, no entres

No hice caso pero cuando toque con mi mano la vieja perilla me dio un escalofrío, no me importo nunca creí en esas cosas un escalofrío no me iba hacer creyente. La gire y la puerta se abrió, no se veía nada estaba todo tan oscuro. Cuando iba a dar un paso adelante él me tomo de la mano y me jalo para atrás. No pude más y no me importo que me viera llorar. Caí sentada en la puerta. Me miro por un segundo y luego se sentó junto a mí y puso su mano en mi hombro. Lo abrase, el a mi y sentí algo que nunca había sentido y no se como describirlo. Nos abrazamos por mucho rato y luego cuando al fin mis lágrimas pararon me levante y le dije:

-Nunca te has preguntado que hay dentro de esta casa

-muchas veces

- entonces que esperas ven -lo mire y el dudo por un rato así que le dije - No me digas que tienes miedo Andrés!

-Si te hace sentir mejor pues entremos-me dijo

Andrés con un tono un poco dudoso Avanzamos y Andrés saco una linterna que traía en la mochila. La casa daba miedo, estaba llena de telas de araña lo cual era de suponerse pues en ese pueblo no había nadie quien se atreviese a entrar, dentro había un estante lleno de botellas que quien sabe que contenían, al otro lado de la habitación un caldero y la chimenea pero lo que mas nos llamo la atención fue que sobre una mesa que estaba en el centro de la casa había un libro, muy extraño debo decirlo. Avanzamos hacia el, y una ráfaga de viento movió las paginas hasta una que traía un símbolo muy curioso.

-que dice-me pregunto Andrés y alumbro con la linterna al libro
-parece una clase de hechizo-le dije-lo leemos?
-me miro con cara de miedo-No me vas a decir que crees en eso?
-claro que no! leámoslo!
-En este día
En esta hora su poder de brujas invocamos
danos control y tráelas de vuelta
pues por su poder iniciamos la guerra-dijimos al mismo tiempo

-ja y a eso le llaman hechizo-dije-ni siquiera rima
-bueno mejor nos vamos deberiamos estar en clase
-esta bien
-lo mire a los ojos con mirada tierna y le dije - gracias!-lo abrase fuertemente y el a mi

Al otro día el cielo estaba raro y sorprendentemente no había viento. Avance por la entrada del colegio y vi como los pequeños de la primaria llegaban disfrazados. Tonterías pensé.Llegue a clase temprano y Andrés ya estaba ahí me miró y yo sentí sonrojarme así que quite la mirada. Me senté en el lugar de costumbre, junto a la ventana. Me gustaba sentarme ahí para contemplar los árboles que había detrás del colegio. Pero ese día hubiera deseado no estar ahí. Andrés se sentó delante de mí y me empezó a hablar de lo de ayer. De un pronto a otro mire la casa y vi una luz débil que salía por la ventana y una sombra cruzaba la ventana una y otra vez. Me asuste tanto y cuando volví la mirada a la clase todos estaban quietos parecían estatuas nadie se movía ni siquiera el profesor solo...solo Andrés que se veía asustado pero no por la casa, el ni siquiera la vio, era porque la clase estaba paralizada.

-Que paso Mel?-dijo- como fue que hiciste eso?
-yo no... yo no se

Salí corriendo de ahí y cuando salí la clase se descongelo y ellos no se dieron cuenta de nada. Andrés salio tras de mi.

-Tengo que averiguar que pasa
-A donde vas?-dijo
-A la casa, se que ahí encontrare la respuesta

estaba por los enormes árboles cuando él me dijo:
-Estas loca, no puedes ir para allá-otra vez tienes miedo?
-y si algo te pasa-me dijo con tono de preocupación- recuerda que hoy es 31
-Si no quieres venir, iré yo sola

Avance con paso rápido, y él me empezó a seguir, tenia la mirada puesta en la casa y me di cuenta de que la luz se había apagado. Al llegar a la entrada de la vieja casa otra vez me quede petrificada pero vencí el miedo y abrí la puerta. La casa estaba tal como la habíamos dejado el día anterior excepto por una cosa, había una vela sobre la mesa al lado del libro y supongo que de ahí vino la luz que vi.

-si tan solo tuviéramos algo con alumbrar, así podríamos ver mejor
-Si pero no traje mi linterna-dijo Andrés y señalando la vela siguió diciendo- y no tengo como encender esa vela!

De pronto se encendió

-como...como paso eso?-dije y inmediatamente agarre su mano -Ouch! quema!
- que?
-Tu mano esta muy caliente
-fui yo?
-al parecer si-dije mientras me acercaba al libro
-Entonces ese hechizo funciono?

-31 de octubre de 1650-empecé ha leer- Queridas descendientes: dejo este libro con los secretos de mi poderosa magia negra para que me venguen. Escribo esto antes de morir porque se que los humanos vienen en camino a matarme lo he visto y aunque mis poderes son superiores ellos acabaran conmigo. Así que mis brujas pasen este libro de generación en generación y obtendrán mis hechizos, mi magia y mis poderes para que logren vengarme. Cuiden del libro porque si ha de caer en manos humanas que hayan de leer el hechizo del poder podrían quedar perdidas si ellos aprenden a manejar los poderes como ustedes han de hacerlo. Para la hija mayor el poder de fuego y rayo para la bruja menor el poder de congelar el tiempo y el aire. Vengar mi muerte es su única misión. Y se los vuelvo a advertir si algún tonto mortal lee el hechizo deben destruirlo antes de que sepa controlar mi poder.

-eso era una carta?

-creo que si, esta justo en la primera parte del libro
- eso explica los poderes pero si nosotros...
-Mira mira lo que encontramos-dijo una voz horrenda.

Volvimos la mirada pero no vimos a nadie. La puerta se cerró lentamente y la vela se apago

-quien iba a decir que los dos humanitos que nos trajeron serian tan tontos como para volver aquí-dijo otra voz horrenda -que haremos con ellos hermana
-pues los mataremos ahora mismo y así regresaremos a este mundo para quedarnos
-y no tendremos que regresar a la sombra cuando acabe Halloween?
-No idiota-dijo-solo hay que matarlos ya mismo
-O antes de las 12
-ya cállate! disculpen en que estábamos, ah si buajaja los mataremos

De pronto se encendieron todas las velas que habían en esa casa y las vimos eran horribles una mas vieja que la otra y llevaban ropa de la época colonial. Me aterre al verlas y se que Andrés también pero me calme al ver que el se había puesto delante mío para protegerme. Las brujas nos miraron con cara de sorpresa pero luego cambio a una mirada maliciosa. Me quede congelada mis ojos se llenaron de lagrimas estaba aterrada otra vez pero él me sostuvo la mano y la apretó fuerte.

-Bien como desean morir tostados o quemados?-dijo la bruja mayor y levanto las manos Empezó a salir fuego de sus manos y este venia hacia nosotros. Andrés me abrazo, sabíamos que moriríamos pero...

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